Público/La República
"Los gastos de la familia real se sufragan con dinero público, y los ciudadanos tenemos derecho a conocer en qué se utilizan".
La Secretaria de cooperación internacional y movimiento republicano del Partido Comunista de España (PCE), Gloria Aguilar, justificó hoy con estas palabras la recogida de firmas impulsada por su partido para presentar ante la Comisión de Peticiones del Congreso una iniciativa para que "las cuentas de la Casa del Rey tengan control público y puedan ser conocidas por todos los españoles".
Los comunistas reaccionaron de esta forma a la información publicada el sábado 2 de enero por el diario Público que recordaba que, durante un año más, el rey gastará los 9 millones de euros de libre disposición que obtendrá de las cuentas del Estado sin ningún tipo de control público. Para Aguilar, esta situación es "anómala" en un Estado de Derecho, como lo es que "los ciudadanos españoles no puedan votar al Jefe del Estado".
Con la recogida de firmas el PCE pretende pedir, también, la publicación en Internet de los salarios de todos los miembros de la familia real, para que los contribuyentes españoles "sepan a qué se destina su dinero", algo que "no sólo sería democrático sino de justicia".
Opacidad de la Casa Real
Los comunistas consideran que la justificación de los gastos del rey es "especialmente necesaria" en un momento de crisis como el que se vive en la actualidad porque, a su juicio, no tiene sentido que "cuando los de abajo lo pasan mal, la Casa Real continúe opaca". Según los comunistas, coincidiendo con el crecimiento del paro y la dificultad para salir de la crisis de los españoles, el rey Juan Carlos ocupa el tercer lugar en la lista de las mayores fortunas y patrimonios de las monarquías europeas. Su riqueza se calcula en 1.700 millones de euros, apuntan desde el PCE.
El Secretario general del partido, José Luis Centella, recordó en un comunicado difundido por la organización que la Constitución otorga al rey el privilegio de disponer libremente de su asignación anual, "lo que no quiere decir que no dé cuenta" de sus gastos "como lo hacen otras casas reales".
Medio millón de firmas
Gloria Aguilar insistió, por otra parte, en que "las donaciones y regalos que recibe el rey en su condición de Jefe de Estado deben ser transparentes y pasar al patrimonio del Estado". En este momento la opacidad de los gastos "reales" es tal que ni los diputados ni el Tribunal de Cuentas ni la Fiscalía, y ni siquiera la comisión de secretos oficiales tienen acceso a dicha información.
Si Izquierda Unida u otro partido con representación parlamentaria no adopta la iniciativa y la presenta en el Congreso, el PCE deberá lograr al menos 500.000 firmas para que la propuesta pueda ser debatida, tal y como establece el artículo 87 de la Constitución.
El rey no sólo recibe 9 millones de euros.
Hay gastos que no paga y que están agazapados en los Presupuestos del Estado, entre ellos, los sueldos de los 127 funcionarios y ocho trabajadores eventuales que dependen de la Casa Real, y que suman un total de 6.209.130 euros. La partida se recoge en el programa 911Q de las Cuentas de 2010, en el apartado titulado “Apoyo a la gestión administrativa de la Jefatura del Estado”, que incluye, además, 321.640 euros para gastos corrientes.
Otra factura que el monarca no paga del presupuesto de que dispone son los viajes al extranjero, que abona el Ministerio de Exteriores. Para este año, se han previsto 15 desplazamientos, con un coste de 415.040 euros, pero es probable que la cifra sea superada, como ocurre todos los años. En 2009, se reservaron 345.000 euros, y al final se consumieron 33.000 más. En 2008, el incremento fue de 180.000 euros, ya que los reyes hicieron cuatro viajes más de los previstos inicialmente.
El monarca no abona la conservación de las residencias familiares –el Palacio Real, el de la Zarzuela, el de Marivent (Mallorca) o el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid)–, propiedades todas ellas de Patrimonio Nacional, organismo dependiente del Ministerio de la Presidencia. Este año se han presupuestado 17,9 millones para la conservación de estos edificios. En 2009 se destinaron 20,5 millones, pero se dejaron de gastar 1,5 millones.
Don Juan Carlos tampoco paga los agentes encargados de la seguridad de la Familia Real, que son costeados por el Ministerio del Interior. Su homólogo de Economía y Hacienda asume, por su parte, los gastos de coches oficiales y chóferes.
Nunca ha trascendido el desglose de los gastos de la Casa del Rey, pese a las exigencias de algunos grupos políticos, como IU, Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). "No conseguimos nada. Es como chocarte contra un muro. Pero tarde o temprano los muros caen. La Monarquía sólo ganará credibilidad si gana en transparencia", augura Joan Herrera, portavoz en el Congreso de ICV. Ya "no es cuestión de ideologías, –aclara Gaspar Llamazares (IU)- de republicanos o monárquicos, sino de calidad democrática".
"Los gastos de la familia real se sufragan con dinero público, y los ciudadanos tenemos derecho a conocer en qué se utilizan".
La Secretaria de cooperación internacional y movimiento republicano del Partido Comunista de España (PCE), Gloria Aguilar, justificó hoy con estas palabras la recogida de firmas impulsada por su partido para presentar ante la Comisión de Peticiones del Congreso una iniciativa para que "las cuentas de la Casa del Rey tengan control público y puedan ser conocidas por todos los españoles".
Los comunistas reaccionaron de esta forma a la información publicada el sábado 2 de enero por el diario Público que recordaba que, durante un año más, el rey gastará los 9 millones de euros de libre disposición que obtendrá de las cuentas del Estado sin ningún tipo de control público. Para Aguilar, esta situación es "anómala" en un Estado de Derecho, como lo es que "los ciudadanos españoles no puedan votar al Jefe del Estado".
Con la recogida de firmas el PCE pretende pedir, también, la publicación en Internet de los salarios de todos los miembros de la familia real, para que los contribuyentes españoles "sepan a qué se destina su dinero", algo que "no sólo sería democrático sino de justicia".
Opacidad de la Casa Real
Los comunistas consideran que la justificación de los gastos del rey es "especialmente necesaria" en un momento de crisis como el que se vive en la actualidad porque, a su juicio, no tiene sentido que "cuando los de abajo lo pasan mal, la Casa Real continúe opaca". Según los comunistas, coincidiendo con el crecimiento del paro y la dificultad para salir de la crisis de los españoles, el rey Juan Carlos ocupa el tercer lugar en la lista de las mayores fortunas y patrimonios de las monarquías europeas. Su riqueza se calcula en 1.700 millones de euros, apuntan desde el PCE.
El Secretario general del partido, José Luis Centella, recordó en un comunicado difundido por la organización que la Constitución otorga al rey el privilegio de disponer libremente de su asignación anual, "lo que no quiere decir que no dé cuenta" de sus gastos "como lo hacen otras casas reales".
Medio millón de firmas
Gloria Aguilar insistió, por otra parte, en que "las donaciones y regalos que recibe el rey en su condición de Jefe de Estado deben ser transparentes y pasar al patrimonio del Estado". En este momento la opacidad de los gastos "reales" es tal que ni los diputados ni el Tribunal de Cuentas ni la Fiscalía, y ni siquiera la comisión de secretos oficiales tienen acceso a dicha información.
Si Izquierda Unida u otro partido con representación parlamentaria no adopta la iniciativa y la presenta en el Congreso, el PCE deberá lograr al menos 500.000 firmas para que la propuesta pueda ser debatida, tal y como establece el artículo 87 de la Constitución.
El rey no sólo recibe 9 millones de euros.
Hay gastos que no paga y que están agazapados en los Presupuestos del Estado, entre ellos, los sueldos de los 127 funcionarios y ocho trabajadores eventuales que dependen de la Casa Real, y que suman un total de 6.209.130 euros. La partida se recoge en el programa 911Q de las Cuentas de 2010, en el apartado titulado “Apoyo a la gestión administrativa de la Jefatura del Estado”, que incluye, además, 321.640 euros para gastos corrientes.
Otra factura que el monarca no paga del presupuesto de que dispone son los viajes al extranjero, que abona el Ministerio de Exteriores. Para este año, se han previsto 15 desplazamientos, con un coste de 415.040 euros, pero es probable que la cifra sea superada, como ocurre todos los años. En 2009, se reservaron 345.000 euros, y al final se consumieron 33.000 más. En 2008, el incremento fue de 180.000 euros, ya que los reyes hicieron cuatro viajes más de los previstos inicialmente.
El monarca no abona la conservación de las residencias familiares –el Palacio Real, el de la Zarzuela, el de Marivent (Mallorca) o el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid)–, propiedades todas ellas de Patrimonio Nacional, organismo dependiente del Ministerio de la Presidencia. Este año se han presupuestado 17,9 millones para la conservación de estos edificios. En 2009 se destinaron 20,5 millones, pero se dejaron de gastar 1,5 millones.
Don Juan Carlos tampoco paga los agentes encargados de la seguridad de la Familia Real, que son costeados por el Ministerio del Interior. Su homólogo de Economía y Hacienda asume, por su parte, los gastos de coches oficiales y chóferes.
Nunca ha trascendido el desglose de los gastos de la Casa del Rey, pese a las exigencias de algunos grupos políticos, como IU, Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). "No conseguimos nada. Es como chocarte contra un muro. Pero tarde o temprano los muros caen. La Monarquía sólo ganará credibilidad si gana en transparencia", augura Joan Herrera, portavoz en el Congreso de ICV. Ya "no es cuestión de ideologías, –aclara Gaspar Llamazares (IU)- de republicanos o monárquicos, sino de calidad democrática".
No hay comentarios:
Publicar un comentario