En un comunicado de prensa de la Comisión Política del C.C. del PCP en el 35 aniversario del “25 de Abril”, ha señalado que “conmemorar Abril, es insistir que el único camino de Abril, sólo es por medio de profundas transformaciones económicas y sociales que pongan en manos del Estado y al servicio del pueblo las principales palancas de la economía, sólo el camino del socialismo puede dar respuestas a los desafíos con que se enfrentan hoy la sociedad portuguesa”.
La Revolución de Abril para los comunistas españoles tiene una especial significación, por cuanto definió como posible el que un pueblo podía derrotar una dictadura y abrir espacios de libertad y democracia y que aún hoy 35 años después no han podido ser destruidos, a pesar de las profundas revisiones que los diferentes gobiernos han realizado para erosionar los elementos más democráticos y sociales heredados de Abril, y que el Partido Comunista Portugués no deja de resaltar participando activamente en la conmemoración y reivindicación de la Revolución de “los claveles”.
Las repercusiones de esta revolución en nuestro país se dejaron sentir en las propias estructuras del régimen dictatorial, que temían que los cambios les superaran y la ruptura democrática, que impulsaba el PCE, fuera avanzando el camino del cambio y de la libertad. Para la resistencia obrera y estudiantil a la dictadura dio nuevos ánimos e impulsos en la lucha, mientras el decrépito tirano y sus más estrechos colaboradores seguían con sus instintos asesinos reprimiéndolos brutalmente. Pero también tuvo repercusión en el estamento militar y algunos jóvenes oficiales no dudaron en organizarse en la Unión Militar Democrática (UMD) y combatir la anacronía franquista y reivindicar una España libre y democrática, siguiendo el ejemplo de Abril. Aquellos militares demócratas fueron perseguidos y represaliados, y cuando la transición democrática nos obligó a tragar con la “continuidad” de un monarca y unas estructuras heredadas de la dictadura, también se tuvo la vileza de apartar a estos honestos y ejemplares demócratas del Ejército y mandarlos al ostracismo y al olvido.
Hoy 35 años después estos militares demócratas, quizás los únicos que ha tenido el Ejercito español en los últimos 70 años, siguen marginados y apartados de los homenajes y del mando. Hace unos días, el 22 de abril, pudo escucharse su voz en un Congreso dedicado a la depuración de los funcionarios bajo la dictadura, organizado por la Universidad de Salamanca. Allí entre estudiantes e historiadores pudo atenderse la sincera y firme voz de Luis Otero, Fernando Reinlein, José Fortes Bouza y José ignacio Domínguez que hablaron de la represión que padecieron y del olvido a que fueron sometidos.
Mientras en Portugal estos hombres son invitados oficialmente a los actos y desfiles que conmemoran Abril, aquí en su país todavía hay una cuenta enorme que salvar con estos ilustres y heroicos antifascistas españoles.
Para acabar con unas palabras de la camarada Esther López Barceló, del PCPV Alicante, que ha publicado en su blog ( http//:estherlopezbarcelo.blogspot.com ).
Hoy a pesar del tratado de Lisboa, soy portuguesa
Hoy, como cada 25 de Abril, soy algo más portuguesa.
Porque allí, el dictador no murió en la cama.
Porque allí, hubo una ruptura democrática.
Porque allí, se ganó la democracia en la calle.
Porque el 25 de Abril es ya un día contra las dictaduras.
Porque el pueblo cuando toma conciencia de su poder,nada ni nadie le pueden detener.
Porque los fusiles no pueden a los claveles.
Porque cuando en cada esquina hay un amigo, somos imparables.
Porque "codo con codo en la calle,(siempre)somos mucho más que dos".
Por todo esto, y mucho más, hoy soy más portuguesa que el año pasado, pero menos que el que viene.
La Revolución de Abril para los comunistas españoles tiene una especial significación, por cuanto definió como posible el que un pueblo podía derrotar una dictadura y abrir espacios de libertad y democracia y que aún hoy 35 años después no han podido ser destruidos, a pesar de las profundas revisiones que los diferentes gobiernos han realizado para erosionar los elementos más democráticos y sociales heredados de Abril, y que el Partido Comunista Portugués no deja de resaltar participando activamente en la conmemoración y reivindicación de la Revolución de “los claveles”.
Las repercusiones de esta revolución en nuestro país se dejaron sentir en las propias estructuras del régimen dictatorial, que temían que los cambios les superaran y la ruptura democrática, que impulsaba el PCE, fuera avanzando el camino del cambio y de la libertad. Para la resistencia obrera y estudiantil a la dictadura dio nuevos ánimos e impulsos en la lucha, mientras el decrépito tirano y sus más estrechos colaboradores seguían con sus instintos asesinos reprimiéndolos brutalmente. Pero también tuvo repercusión en el estamento militar y algunos jóvenes oficiales no dudaron en organizarse en la Unión Militar Democrática (UMD) y combatir la anacronía franquista y reivindicar una España libre y democrática, siguiendo el ejemplo de Abril. Aquellos militares demócratas fueron perseguidos y represaliados, y cuando la transición democrática nos obligó a tragar con la “continuidad” de un monarca y unas estructuras heredadas de la dictadura, también se tuvo la vileza de apartar a estos honestos y ejemplares demócratas del Ejército y mandarlos al ostracismo y al olvido.
Hoy 35 años después estos militares demócratas, quizás los únicos que ha tenido el Ejercito español en los últimos 70 años, siguen marginados y apartados de los homenajes y del mando. Hace unos días, el 22 de abril, pudo escucharse su voz en un Congreso dedicado a la depuración de los funcionarios bajo la dictadura, organizado por la Universidad de Salamanca. Allí entre estudiantes e historiadores pudo atenderse la sincera y firme voz de Luis Otero, Fernando Reinlein, José Fortes Bouza y José ignacio Domínguez que hablaron de la represión que padecieron y del olvido a que fueron sometidos.
Mientras en Portugal estos hombres son invitados oficialmente a los actos y desfiles que conmemoran Abril, aquí en su país todavía hay una cuenta enorme que salvar con estos ilustres y heroicos antifascistas españoles.
Para acabar con unas palabras de la camarada Esther López Barceló, del PCPV Alicante, que ha publicado en su blog ( http//:estherlopezbarcelo.blogspot.com ).
Hoy a pesar del tratado de Lisboa, soy portuguesa
Hoy, como cada 25 de Abril, soy algo más portuguesa.
Porque allí, el dictador no murió en la cama.
Porque allí, hubo una ruptura democrática.
Porque allí, se ganó la democracia en la calle.
Porque el 25 de Abril es ya un día contra las dictaduras.
Porque el pueblo cuando toma conciencia de su poder,nada ni nadie le pueden detener.
Porque los fusiles no pueden a los claveles.
Porque cuando en cada esquina hay un amigo, somos imparables.
Porque "codo con codo en la calle,(siempre)somos mucho más que dos".
Por todo esto, y mucho más, hoy soy más portuguesa que el año pasado, pero menos que el que viene.
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