Barriadas como Carretera de Cádiz y Puerto de la Torre-Teatinos cuentan con agrupaciones de desempleados · El próximo 15 de mayo hay prevista una movilización
málagahoy.es
La unión hace la fuerza. Esto debieron de pensar los desempleados de la capital que decidieron unirse en asociaciones y asambleas para intentar buscar "una solución" a un problema que ya afecta a 191.257 malagueños. La primera que surgió en Málaga fue la Asamblea de Parados de Carretera Cádiz hace ya más de dos años. "Nacimos para dar voz a los desempleados. No somos invisibles. Somos más de 4 millones de personas que luchamos por tener un trabajo", indica Paco Moya, un parado de 56 años miembro de esta asociación.
"La agrupación de parados de carretera Cádiz pretende servir de punto de encuentro de los desempleados de nuestro barrio, en el que el 80% de los habitantes están en paro", señala Paco Moya, que añade que esta asociación sirve "para coordinar a todos los parados y para dar a conocer esta problemática a la sociedad, defender de forma conjunta los derechos de los desempleados ante las administraciones publica y reclamar políticas activas de creación de empleo". Crear una red de solidaridad y de apoyo para actuar de forma conjunta y unitaria ante los problemas de sus miembros, es otro de los objetivos de esta congregación de parados.
Pero Carretera Cádiz no está sola. Tras su nacimiento, poco a poco los vecinos en paro de distintos puntos de la provincia decidieron organizarse y agruparse para ser escuchados. Así surgieron otras asociaciones en municipios como Álora, Cártama, Pizarra y Campillos, que junto con la de Puerto de la Torre-Teatinos, Carretera Cádiz y Ferrallas y Encofradores en Paro dieron lugar a la Coordinadora provincial de Parados de Málaga.
La función principal de todas estas asociaciones es dar "visibilidad" a la situación de los desempleados y de los trabajadores en situación precaria porque "no somos unos parásitos". Reivindican la falta de actuaciones concretas contra la crisis. Así aseveran que medidas como la subida del IVA "perjudican mucho a quienes tienen menos ingresos y que cada vez son más". Entre sus reclamaciones se encuentran el establecimiento de políticas activas en creación de empleo, un plan de empleo para los parados de larga duración, que el salario mínimo sea de 1.000 euros y protección social para las familias en paro. También apuestan por que las empresas cumplan los convenios. "Hay gente contratada seis horas y trabajan 12. Esto no puede ser. Si se cumpliesen los convenios habría mucho más trabajo", señaló Paco Moya.
Para aliviar la situación actual que viven los más de 4 millones de parados que hay actualmente en España, desde la agrupación de Carretera Cádiz exigen la suspensión de la obligación de pago de la hipoteca a las unidades familiares en paro y un seguro de paro mientras dure la condición de desempleado.
Con estas medidas se podrían paliar las consecuencias "nefastas" del desempleo que lleva a muchas personas a intentar subsistir con menos de 500 euros al mes. Este es el caso de Paco que dejará de cobrar el desempleo el próximo mes de julio. "Hasta ahora estoy cobrando 700 euros, pero a partir de julio sólo cobraré 426 euros. Hacer frente a una hipoteca y una familia con ese dinero es imposible. No hay forma de que salgan las cuentas. Yo no quiero que me den ayudas. Sólo quiero un trabajo con el que poder vivir día tras días. No pido nada más", señala Moya.
El trabajo conjunto de estas asociaciones y colectivos de parados plantean una alternativa a los cauces oficiales en la búsqueda de trabajo y formación para los desempleados. "Contamos con una red de solidaridad entre los desempleados. Nos hemos convertido en punto de encuentro en el que muchos compañeros acuden para intercambiar experiencia", señala. Igualmente se ha creado un grupo de trabajo que ayuda a la realización de currículum, que recopila cursos y ofertas de empleo para ponerla a disposición de los desempleados que acuden en busca de información. Además, se ha creado una base de datos con los perfiles profesionales de los miembros de la agrupación.
Paco señala que acuden tanto jóvenes como personas más mayores en busca de ayuda. "Tenemos jóvenes muy preparados que no tienen trabajo y recurren a nosotros para ver si le podemos ofrecer algo. La realidad es bien distinta porque no ofrecemos trabajo, sino ayuda para encontrarlo". indicó. Durante estos dos años de existencias tanto esta asociación como otras de la provincia como la Asociación de parados de Puerto de la Torre-Teatinos no han parado de movilizarse y reivindicar un puesto de trabajo. Paco señala que reclaman puestos de trabajo en las obras municipales como el Metro y solicitan que se tomen medidas para los sectores más desfavorecidos, como los mayores de 45 años. "No se deben hacer más recortes que dañen a los desempleados", señala a la vez que aboga por que "se implante la renta básica de subsistencia para las personas en paro de más duración". Respecto a las obras municipales, Paco recuerda que el año pasado se aprobó una moción en el Ayuntamiento para que "las microactuaciones" de los barrios las realizasen los vecinos desempleados y "a día de hoy, aún no se ha hecho nada".
Por ello, sus recriminaciones también recaen sobre la actuación de las instituciones. "Tanto el Ayuntamiento como la Junta de Andalucía siempre nos dice lo mismo. Nos callan con buenas palabras, pero los objetivos nunca se cumplen", indica.
Pero la finalidad de estas organizaciones van más allá. Tras la situación de desahucio que están viviendo muchas familias, desde la coordinadora provincial de parados están estudiando organizar otra asociación paralela para intentar frenar este problema. "No hay derecho a que les quiten las viviendas a los parados. La situación es cada vez más enrevesada. Además de tener que subsistir con unos ingresos mínimos deben luchar con el banco para no quedarse sin techo", lamentó Paco.
Por su parte, Félix Porras, miembro de la Asociación de Parados de Puerto de la Torre-Teatinos, señala que el próximo 15 de mayo saldrán a la calle para apoyar la manifestación que se ha convocado a raíz de la convocada el pasado 7 de abril por Juventud Sin Futuro en la que unos 3.000 de jóvenes españoles se concentraron contra el desempleo, la especulación inmobiliaria y el "negro futuro" de las pensiones.
"Esta manifestación ha marcado un antes y un después. Estamos preparando las movilizaciones que ha convocado Democracia Real para salir a la calle el día 15 de mayo, a las 18:00, bajo el lema Democracia Real YA. No somos mercancía en manos de políticos y banqueros", indica Porras, que asegura que el movimiento es una respuesta a la falta de implicación de las instituciones.
Además de esta próxima movilización, desde la Coordinadora provincial se están preparando actuaciones después de las próximas elecciones municipales del 22 de mayo. "Durante el periodo electoral no queremos movilizarnos para que no se politicen nuestras reivindicaciones. Una vez se celebren los comicios volveremos a salir a la calle para hacernos oír y que la gente escuche que nuestro objetivo es un trabajo, que no somos unos parásitos", recalca Paco.
"Ya no sabemos a que institución acudir, ya que la situación, en lugar de mejorar, cada vez se hace más insostenible. La calle es nuestro lugar de batalla, porque tenemos que seguir luchando por nuestros derechos, porque hay mucha gente que lo está pasando mal", añade.
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La unión hace la fuerza. Esto debieron de pensar los desempleados de la capital que decidieron unirse en asociaciones y asambleas para intentar buscar "una solución" a un problema que ya afecta a 191.257 malagueños. La primera que surgió en Málaga fue la Asamblea de Parados de Carretera Cádiz hace ya más de dos años. "Nacimos para dar voz a los desempleados. No somos invisibles. Somos más de 4 millones de personas que luchamos por tener un trabajo", indica Paco Moya, un parado de 56 años miembro de esta asociación.
"La agrupación de parados de carretera Cádiz pretende servir de punto de encuentro de los desempleados de nuestro barrio, en el que el 80% de los habitantes están en paro", señala Paco Moya, que añade que esta asociación sirve "para coordinar a todos los parados y para dar a conocer esta problemática a la sociedad, defender de forma conjunta los derechos de los desempleados ante las administraciones publica y reclamar políticas activas de creación de empleo". Crear una red de solidaridad y de apoyo para actuar de forma conjunta y unitaria ante los problemas de sus miembros, es otro de los objetivos de esta congregación de parados.
Pero Carretera Cádiz no está sola. Tras su nacimiento, poco a poco los vecinos en paro de distintos puntos de la provincia decidieron organizarse y agruparse para ser escuchados. Así surgieron otras asociaciones en municipios como Álora, Cártama, Pizarra y Campillos, que junto con la de Puerto de la Torre-Teatinos, Carretera Cádiz y Ferrallas y Encofradores en Paro dieron lugar a la Coordinadora provincial de Parados de Málaga.
La función principal de todas estas asociaciones es dar "visibilidad" a la situación de los desempleados y de los trabajadores en situación precaria porque "no somos unos parásitos". Reivindican la falta de actuaciones concretas contra la crisis. Así aseveran que medidas como la subida del IVA "perjudican mucho a quienes tienen menos ingresos y que cada vez son más". Entre sus reclamaciones se encuentran el establecimiento de políticas activas en creación de empleo, un plan de empleo para los parados de larga duración, que el salario mínimo sea de 1.000 euros y protección social para las familias en paro. También apuestan por que las empresas cumplan los convenios. "Hay gente contratada seis horas y trabajan 12. Esto no puede ser. Si se cumpliesen los convenios habría mucho más trabajo", señaló Paco Moya.
Para aliviar la situación actual que viven los más de 4 millones de parados que hay actualmente en España, desde la agrupación de Carretera Cádiz exigen la suspensión de la obligación de pago de la hipoteca a las unidades familiares en paro y un seguro de paro mientras dure la condición de desempleado.
Con estas medidas se podrían paliar las consecuencias "nefastas" del desempleo que lleva a muchas personas a intentar subsistir con menos de 500 euros al mes. Este es el caso de Paco que dejará de cobrar el desempleo el próximo mes de julio. "Hasta ahora estoy cobrando 700 euros, pero a partir de julio sólo cobraré 426 euros. Hacer frente a una hipoteca y una familia con ese dinero es imposible. No hay forma de que salgan las cuentas. Yo no quiero que me den ayudas. Sólo quiero un trabajo con el que poder vivir día tras días. No pido nada más", señala Moya.
El trabajo conjunto de estas asociaciones y colectivos de parados plantean una alternativa a los cauces oficiales en la búsqueda de trabajo y formación para los desempleados. "Contamos con una red de solidaridad entre los desempleados. Nos hemos convertido en punto de encuentro en el que muchos compañeros acuden para intercambiar experiencia", señala. Igualmente se ha creado un grupo de trabajo que ayuda a la realización de currículum, que recopila cursos y ofertas de empleo para ponerla a disposición de los desempleados que acuden en busca de información. Además, se ha creado una base de datos con los perfiles profesionales de los miembros de la agrupación.
Paco señala que acuden tanto jóvenes como personas más mayores en busca de ayuda. "Tenemos jóvenes muy preparados que no tienen trabajo y recurren a nosotros para ver si le podemos ofrecer algo. La realidad es bien distinta porque no ofrecemos trabajo, sino ayuda para encontrarlo". indicó. Durante estos dos años de existencias tanto esta asociación como otras de la provincia como la Asociación de parados de Puerto de la Torre-Teatinos no han parado de movilizarse y reivindicar un puesto de trabajo. Paco señala que reclaman puestos de trabajo en las obras municipales como el Metro y solicitan que se tomen medidas para los sectores más desfavorecidos, como los mayores de 45 años. "No se deben hacer más recortes que dañen a los desempleados", señala a la vez que aboga por que "se implante la renta básica de subsistencia para las personas en paro de más duración". Respecto a las obras municipales, Paco recuerda que el año pasado se aprobó una moción en el Ayuntamiento para que "las microactuaciones" de los barrios las realizasen los vecinos desempleados y "a día de hoy, aún no se ha hecho nada".
Por ello, sus recriminaciones también recaen sobre la actuación de las instituciones. "Tanto el Ayuntamiento como la Junta de Andalucía siempre nos dice lo mismo. Nos callan con buenas palabras, pero los objetivos nunca se cumplen", indica.
Pero la finalidad de estas organizaciones van más allá. Tras la situación de desahucio que están viviendo muchas familias, desde la coordinadora provincial de parados están estudiando organizar otra asociación paralela para intentar frenar este problema. "No hay derecho a que les quiten las viviendas a los parados. La situación es cada vez más enrevesada. Además de tener que subsistir con unos ingresos mínimos deben luchar con el banco para no quedarse sin techo", lamentó Paco.
Por su parte, Félix Porras, miembro de la Asociación de Parados de Puerto de la Torre-Teatinos, señala que el próximo 15 de mayo saldrán a la calle para apoyar la manifestación que se ha convocado a raíz de la convocada el pasado 7 de abril por Juventud Sin Futuro en la que unos 3.000 de jóvenes españoles se concentraron contra el desempleo, la especulación inmobiliaria y el "negro futuro" de las pensiones.
"Esta manifestación ha marcado un antes y un después. Estamos preparando las movilizaciones que ha convocado Democracia Real para salir a la calle el día 15 de mayo, a las 18:00, bajo el lema Democracia Real YA. No somos mercancía en manos de políticos y banqueros", indica Porras, que asegura que el movimiento es una respuesta a la falta de implicación de las instituciones.
Además de esta próxima movilización, desde la Coordinadora provincial se están preparando actuaciones después de las próximas elecciones municipales del 22 de mayo. "Durante el periodo electoral no queremos movilizarnos para que no se politicen nuestras reivindicaciones. Una vez se celebren los comicios volveremos a salir a la calle para hacernos oír y que la gente escuche que nuestro objetivo es un trabajo, que no somos unos parásitos", recalca Paco.
"Ya no sabemos a que institución acudir, ya que la situación, en lugar de mejorar, cada vez se hace más insostenible. La calle es nuestro lugar de batalla, porque tenemos que seguir luchando por nuestros derechos, porque hay mucha gente que lo está pasando mal", añade.
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