El modelo de explotación privada del Metro de Málaga y el retraso en entrada en funcionamiento

Eduardo Zorrilla

Coordinador Local y concejal de IULV-CA de Málaga

Mañana jueves 29 de septiembre, el Pleno del Ayuntamiento de Málaga debatirá una moción de IZQUIERDA UNIDA (IULV-CA) en relación al anuncio, conocido esta semana por la prensa, de que la Junta de Andalucía ha decidido no poner en servicio el metro de Málaga el 11 de noviembre de este año como estaba anunciado, sino hasta el próximo febrero de 2013. Los dos tramos que iban a entrar en funcionamiento son los que discurren, en la línea 1, entre el Palacio de los Deportes Martín Carpena con la estación del barrio de La Isla, en la calle Héroe de Sostoa, en la línea 1, y en el Campus de Teatinos en superficie, en la línea 2.

La Junta de Andalucía ha señalado que este parón se produce porque un estudio de la concesionaria señala que es inviable económicamente poner en marcha estos dos pequeños tramos inconexos. Sin embargo, no resulta creíble que estos estudios de viabilidad económica se hayan hecho a menos de dos meses del inicio, anunciado para el 11 de noviembre de este año.

Además, el motivo aducido, la inviabilidad económica, resulta paradójico, máxime cuando el modelo elegido por la Junta de  Andalucía para la construcción y explotación de las líneas 1 y 2 del metro de Málaga fue el de concesión de obra pública, el conocido como “modelo alemán”. Este modelo consiste, básicamente en que una empresa privada financia las obras, en todo o en parte, a cambio de la concesión de la explotación y gestión del servicio por una serie de años.

En su momento, IZQUIERDA UNIDA fue la única que se opuso a financiación de las obras del metro de Málaga y su gestión posterior mediante este “modelo alemán”, ya que suponía la entrega de una infraestructura básica para la ciudadanía a la gestión privada, a diferencia de otras ciudades, como Madrid o Barcelona, en las que se optó por un modelo de gestión netamente público.

Además, en una moción del 14 de mayo de 2008 ya señalábamos varios problemas que se estaban produciendo, a causa precisamente de la fórmula de construcción y explotación elegida, como un notable retraso e incremento del coste en la línea 2, la duplicación del precio inicial de la línea 1 a causa de las pretensiones de la concesionaria, así como la indefinición sobre contenidos y plazos  del tramo común de las líneas 1 y 2.

El tiempo, por desgracia, ha vuelto a darnos la razón en cuanto al retraso de la fecha prevista de entrada en funcionamiento de estas dos líneas, lo que viene a sumarse al anuncio hace unos meses por la Junta de retraso “sine die” de la ejecución del tramo que uniría la estación del Guadalmedina con la Malagueta y la futura línea 3.

Por ello, desde el Grupo municipal de IZQUIERDA UNIDA propondremos en el próximo Pleno del Ayuntamiento de Málaga que se inste a la Junta de Andalucía para que, a la mayor brevedad posible, se pongan en servicio los tramos previstos, así como que se termine la ejecución de la totalidad de las líneas 1 y 2.