La Comisión Permanente del PCE valora positivamente la marcha del debate asambleario, en la medida que está evidenciando la hegemonía que tiene en Izquierda Unida un programa y un discurso político anticapitalista, alternativo, federal y republicano, a la vez que se abre paso la propuesta de refundación de IU en un sentido participativo y democrático que permita recuperar plenamente los principios y valores que la vieron nacer como movimiento político y social, o sea, una organización federal y unitaria sólida, enraizada en la realidad social y como referente político de ésta. El documento presentado y ratificado en la Conferencia Política del partido, firmado por cien compañeros y compañeras de IU, representantes de su pluralidad, se configura como base sobre la que refundar el proyecto.
En la misma línea avanza el convencimiento de que la IX Asamblea no cierra el debate, sino que abre una segunda fase en la que se profundicen y desarrollen aspectos que en esta asamblea sólo esbozaremos. Tal es el caso del Programa que, desde las señas de identidad que IU se dé, deberá debatirse y concretarse con el conjunto de la izquierda política y social a través de una gran Convocatoria Social que posibilitará el relanzamiento organizativo de IU.
En consecuencia, desde el respeto y la consideración a todas las propuestas políticas que se han presentado, y están siendo debatidas y mejoradas por la militancia en las organizaciones de base, consideramos que la mejor síntesis, la única que sería asumida por el conjunto de la organización, es la que los delegados y delegadas realicen en la asamblea, para lo cual la Asamblea debe explicitar el documento sobre el que articular el debate y sobre el que hacer la síntesis.
Nuestro compromiso es asumir con lealtad los resultados del debate en la medida que representen una síntesis unitaria en la que se vea reflejada toda la organización.
En el mismo sentido consideramos que la mejor dirección es la que, fruto de la votación a las diferentes candidaturas, represente la pluralidad de IU, la integración de todas las corrientes y la unidad en torno al programa político y a unos métodos de funcionamiento democráticos que acaben con la inercia de bloques, impulsando el trabajo de todos y todas en las tareas de recuperación, reconstrucción, refundación y relanzamiento de IU.
Seguiremos trabajando junto al resto de colectivos y personas en la conformación de una candidatura que, representando las distintas aportaciones que se formulan al documento “Por una IU anticapitalista…”, defiendan una nueva etapa para IU. Una candidatura comprometida a trabajar para que la dirección resultante de la asamblea tenga un carácter colectivo y unitario capaz de afrontar los retos que la crisis del neoliberalismo nos impone y para contribuir a evitar que las políticas del gobierno español y las de un capitalismo refundado en el mundo en torno a EE.UU. continúen empobreciendo a los pueblos.
En la misma línea avanza el convencimiento de que la IX Asamblea no cierra el debate, sino que abre una segunda fase en la que se profundicen y desarrollen aspectos que en esta asamblea sólo esbozaremos. Tal es el caso del Programa que, desde las señas de identidad que IU se dé, deberá debatirse y concretarse con el conjunto de la izquierda política y social a través de una gran Convocatoria Social que posibilitará el relanzamiento organizativo de IU.
En consecuencia, desde el respeto y la consideración a todas las propuestas políticas que se han presentado, y están siendo debatidas y mejoradas por la militancia en las organizaciones de base, consideramos que la mejor síntesis, la única que sería asumida por el conjunto de la organización, es la que los delegados y delegadas realicen en la asamblea, para lo cual la Asamblea debe explicitar el documento sobre el que articular el debate y sobre el que hacer la síntesis.
Nuestro compromiso es asumir con lealtad los resultados del debate en la medida que representen una síntesis unitaria en la que se vea reflejada toda la organización.
En el mismo sentido consideramos que la mejor dirección es la que, fruto de la votación a las diferentes candidaturas, represente la pluralidad de IU, la integración de todas las corrientes y la unidad en torno al programa político y a unos métodos de funcionamiento democráticos que acaben con la inercia de bloques, impulsando el trabajo de todos y todas en las tareas de recuperación, reconstrucción, refundación y relanzamiento de IU.
Seguiremos trabajando junto al resto de colectivos y personas en la conformación de una candidatura que, representando las distintas aportaciones que se formulan al documento “Por una IU anticapitalista…”, defiendan una nueva etapa para IU. Una candidatura comprometida a trabajar para que la dirección resultante de la asamblea tenga un carácter colectivo y unitario capaz de afrontar los retos que la crisis del neoliberalismo nos impone y para contribuir a evitar que las políticas del gobierno español y las de un capitalismo refundado en el mundo en torno a EE.UU. continúen empobreciendo a los pueblos.
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