El coordinador federal de IU destaca que la nueva congelación
de los salarios a los empleados públicos entra dentro de la estrategia para
“deteriorar los servicios públicos y justificar las futuras privatizaciones” y
que el raquítico aumento del 0,25% de las pensiones supone “una grave reducción
del poder adquisitivo de los pensionistas”
El portavoz económico parlamentario, Alberto Garzón, afirma
que las cuentas públicas para el próximo año consolidan a España como un país
“en vías de subdesarrollo por su carácter dependiente”, con unas líneas
generales “impuestas y diseñadas desde fuera por la troika”
El Coordinador Federal de Izquierda Unida y presidente
portavoz del Grupo Parlamentario de IU-La Izquierda Plural, Cayo Lara, valoró
que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) 2014 que han entrado hoy en el
Congreso “son los presupuestos de las tres ‘P’: Paro, Pobreza y Pesimismo”. En
su opinión, “son unos Presupuestos en blanco y negro. Destruyen empleo,
aumentan la pobreza y no crean esperanza ni confianza en los ciudadanos de
nuestro país”.
Lara, que ofreció una rueda de prensa en la Cámara Baja junto al
también diputado de IU y portavoz económico del grupo parlamentario, Alberto
Garzón, mientras el ministro Cristóbal Montoro proseguía su larga explicación a
los periodistas de las cuentas públicas del Estado una planta más arriba,
incidió en que con las medidas planteadas “va ser muy difícil que se cumpla la
recuperación anunciada. Se continúa destruyendo empleo, público y privado;
público porque sólo se repone 1 de cada 10 plazas de funcionarios que se
jubilan, y privado porque continúa aplicándose la reforma laboral”.
El máximo responsable de IU denunció que la nueva
congelación de los salarios a los empleados públicos entra dentro de la
estrategia para “deteriorar los servicios públicos y justificar las futuras
privatizaciones que se siguen planteando en la hoja de ruta del PP”.
Tachó también los PGE 2014 de “raquíticos e injustos”; lo
primero, porque “no se aborda en serio la lucha contra el fraude fiscal” o
porque no se repone la plantilla de los inspectores tributarios, una clara
demostración de la “falta de voluntad” para atacar este problema. El
calificativo de “injustos” se justifica dado que siguen siendo los trabajadores
asalariados los que más aportan al IRPF, lo que se repite con el IVA y los
impuestos especiales.
Lara destacó que el incremento de sólo el 0,25% de las
pensiones para el año próximo confirmado hoy supone “una grave reducción del
poder adquisitivo de los pensionistas” ya que, incluso con una “inflación
benevolente” cercana al 1%.
En términos similares se expresó el diputado malagueño,
Alberto Garzón, para quien estos terceros Presupuestos Generales del PP en esta
legislatura lo que consolidan es un país “en vías de subdesarrollo por su
carácter dependiente”, con unas líneas generales “impuestas y diseñadas desde
fuera por la Troika
(el FMI, el BCE y la
Comisión Europea ). Se agudiza así el carácter periférico y
dependiente de la economía española dentro de la economía europea”.
El diputado de IU por Málaga criticó amargamente que Mariano
Rajoy y su equipo económico confirmen así que la salida a la crisis sólo pasa
por convertir a España “en un país de bajos salarios”, algo con lo que, además
de la troika, está de acuerdo el Banco de España. Todo ello da un resultado
“insostenible y perjudicial para mantener la democracia y los servicios
sociales públicos, que son una conquista de los trabajadores”.
“Es el ejemplo más claro –apostilló- de cómo el Gobierno de
Rajoy lo que quiere es convertir a España en un país de bajos salarios y en el
que el crecimiento económico provenga de esas exportaciones derivadas de
empresa que pagan muy bajos salarios y que compiten con países que también
pagan bajos salarios”.
En su análisis de las cuentas públicas Garzón censuró
también que el Gobierno del PP apueste por impulsar las exportaciones en vez de
buscar un aumento del consumo y de la demanda interna. Por ello, auguró más
quiebras de pequeñas y medianas empresas, que son las que van a seguir
soportando la asfixia de financiación por parte de la Banca.
Preguntado por la partida destinada a la Casa del Rey -que desciende
un 1,89% con respecto a 2013, hasta los 7,78 millones de euros-, Cayo Lara ha
comparado esta caída con el recorte de casi el 5% que sufrirán los distintos
ministerios. “La Casa Real
tiene una bonificación, un plus con respeto al recorte que se aplica al resto
de ministerios”, dijo, además de recordar que esto viene siendo así desde que
se agudizó la crisis.
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